Los vecinos de Casería de Montijo manifiestan sentirse "indignados y engañados" por la situación de abandono a la que la Junta de Andalucía tiene sometidas sus viviendas. Y es que, aunque los proyectos para la rehabilitación de 28 edificios y las subvenciones para su consecución están aprobados desde 2008, hasta el momento sólo se han reformado tres de los inmuebles afectados. Comentan además, que el programa de recuperación sólo afecta a 2.000 vecinos, mientras que la realidad es que existen 96 edificios en condiciones similares, habitados por 4.600 ciudadanos. Otro de los motivos que contribuye al malestar de quienes viven en el citado barrio es que cada uno de los bloques perjudicados ha de pagar 1.000 euros por licencia urbanística, de manera que durante los tres años que llevan esperando a la rehabilitación de sus viviendas, han tenido que abonar la misma licencia cada año. Una cuota que ahora caduca a los seis meses. Los vecinos aseguran que, de no obtener una respuesta en un plazo de dos meses, todo el barrio se movilizará.
Paco Puentedura, candidato de Izquierda Unida a la alcaldía de Granada capital, reclama al actual gobierno local que llegue a un convenio con la Junta de Andalucía para adelantar el dinero necesario para la financiación de las obras, con vistas a que la administración andaluza lo reponga después. Una segunda petición lanzada al Ayuntamiento, es que la tasa urbanística y el impuesto de construcciones y obras que hayan tenido que sufragar las comunidades de vecinos para la rehabilitación de viviendas no tengan un proceso de caducidad. "Los vecinos no tienen porqué pagar los platos rotos de la irresponsabilidad de un gobierno regional que no hace llegar el dinero cuando toca", sostuvo ayer el concejal de IU.
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